Monilla [Monilinia sp.]

Descripción

Es un hongo ascomiceto que afecta a los frutales de hueso (melocotonero, cerezo, albaricoquero, nectarino, ciruelo y almendro) y, en menor medida, a los de pepita.

Síntomas y daños

Marchitez en yemas y brotes, chancros en ramas y podredumbre de frutos. Las flores infectadas se marchitan y se pegan al brote en forma de masas gomosas. Los brotes y yemas se infectan a partir de las flores u otros brotes infectados, produciéndose chancros elípticos con producción masiva de goma. Las hojas de los brotes infectados se vuelven marrones y permanecen sobre el brote sin caerse. El fruto puede ser infectado en cualquier momento pero la mayor gravedad tiene lugar cuando es infectado al comenzar a madurar; entonces aparecen pequeñas manchas marrones que rápidamente muestran podredumbre; sobre estas zonas se desarrollan conidios unas 36 horas después de la infección; a los 5 días los frutos están totalmente podridos y cubiertos de conidios; el fruto infectado permanece sobre el árbol perdiendo su contenido en agua y dando lugar a momias.

Ciclo biológico

Inverna en forma de micelio o conidios sobre las momias que se encuentran en el árbol o suelo, o sobre los brotes y ramas infectadas. En primavera, este micelio produce nuevos conidios que, unidos a los existentes, infectan las flores por el aire, agua o insectos. De los restos florales se liberan nuevos conidios. Al mismo tiempo el micelio avanza hacia el fruto y el brote. Los conidios penetran en el fruto a través de heridas o aperturas naturales y colonizan los tejidos con rapidez. El estado sexual o teleomorfo se produce ocasionalmente y tiene una importancia despreciable en su ciclo vital. Alta humedad y temperaturas templadas (15-25ºC) favorecen el desarrollo del hongo. La infección puede tener lugar entre 5-30ºC. Las momias, pedúnculos, brotes y ramas infectados son la principal fuente de inóculo para el año siguiente si no son retirados y destruidos. Las flores dañadas por heladas son especialmente susceptibles.

Medidas de prevención y/o culturales

Retirada de momias. Quema de brotes infectados. Uso de especies (albaricoques y cerezos son más susceptibles) y variedades resistentes. Algunos hongos del género Penicillium son antagonistas y pueden ser incorporados al calendario de tratamientos fungicidas.