Moteado [Venturia sp.]
Descripción
Es un hongo ascomiceto que puede atacar a frutos y hojas de especies del género Malus, especialmente al manzano, pero también a los géneros Pyrus (peral), Sorbus, Pyracantha, Cotoneaster, Crataegus, Viburnum, etc. Con menor frecuencia también puede afectar a yemas y flores.
Síntomas y daños
En las hojas: aparecen en ambas superficies manchas cloróticas circulares que van cubriéndose de conidios de color marrón que dan a la lesión un color verde-oliva oscuro de textura pulverulenta; las lesiones pueden coalescer, cubriendo gran parte de la hoja; las infecciones causan deformaciones convexas que dan un aspecto de abolladura a las hojas infectadas.
En las flores: las lesiones son más oscuras y al epidermis se suberiza y agrieta, principalmente cáliz y corola.
En los frutos: si el fruto es joven, la parte afectada cesa su desarrollo y el fruto se deforma; si el fruto es maduro, las manchas marrones o negras se agrietan.
Ciclo biológico
Inverna en peritecios en hojas caídas o en la corteza del árbol. En primavera los peritecios maduran y se liberan las ascosporas que son dispersadas por el viento a las partes verdes de los árboles, en donde necesitan agua líquida para germinar y temperatura entre 6 y 26ºC (infección primaria). El micelio perfora la cutícula y crece entre la cutícula y la pared celular externa de las células epidérmicas. Las primeras manchas verde-oliva aparecen 20 días más tarde. Los conidios allí formados son el origen de infecciones secundarias al ser transportados por la lluvia. La lluvia tiene un papel importante en la infección sólo si la temperatura está entre 7-25°C. No se producen infecciones si el verano es cálido y seco. Las hojas infectadas caen al suelo y el micelio forma peritecios que pasan el invierno.
Medidas de prevención y/o culturales
Eliminar las hojas infectadas caídas. Fomentar la flora y fauna microbiana (p.ej. mediante un abono nitrogenado) del suelo para favorecer la desintegración de los residuos foliares. Tratar con urea al 5% en post-cosecha para inhibir la formación de los peritecios y favorecer la degradación de las hojas. Utilizar modelos predictivos basados en temperatura, cantidad y duración de la precipitación y duración del período de humedad en las hojas.