Hortícolas
Los cultivos hortícolas —como tomate, pimiento, pepino, calabacín o melón— representan una de las principales fuentes de valor agrario en España, especialmente en regiones como Almería y Murcia, donde predominan los sistemas de producción bajo invernadero y se produce la hectárea más valiosa del campo español . Este modelo intensivo permite un alto grado de tecnificación y control, pero también implica una mayor presión de plagas durante todo el ciclo de cultivo.
Sin embargo, este modelo de agricultura intensiva enfrenta desafíos significativos, siendo las plagas una de las principales amenazas para la productividad y la calidad de los cultivos. Entre las plagas más comunes en los invernaderos de estas regiones se encuentran:
- Trips: Insectos que dañan hojas y frutos, y actúan como vectores de virus.
- Mosca blanca: Causa debilitamiento de las plantas y transmite enfermedades virales.
- Pulgones : Afectan el crecimiento de las plantas y son vectores de virus.
- Ácaros: Provocan daños en hojas, reduciendo la fotosíntesis.
- Minadores de hojas: Sus larvas crean galerías en las hojas, afectando la capacidad fotosintética.
- Oídio: Hongo que aparece como un polvillo blanco sobre hojas y tallos, frecuente en condiciones secas y templadas. Dagonis®, es el fungicida con eficacia excepcional y duradera para el control de enfermedades como oídio , alternaria, mycosphaerella, etc. para una producción sostenible en todos tus cultivos hortícolas
- Mildiu: Afecta principalmente a tomate, melón y cucurbitáceas, causando manchas aceitosas en hojas que evolucionan a necrosis.
- Botritis (podredumbre gris): Enfermedad fúngica que se desarrolla en condiciones de alta humedad, dañando flores, hojas y frutos.
- Fusariosis y verticilosis: Enfermedades del suelo que afectan el sistema vascular, causando marchitez y pérdidas importantes de producción.
- Virus: Numerosos virus transmitidos por vectores como trips, pulgones y mosca blanca (TSWV, TYLCV, CMV, etc.) comprometen la viabilidad comercial de muchos cultivos.
Además de Almería y Murcia, otras regiones como Extremadura y Sevilla desempeñan un papel estratégico en la producción de tomate para industria , con más de 22.000 hectáreas cultivadas y una producción que supera los 2 millones de toneladas en 2024. Por su parte, el Valle del Ebro (Navarra, La Rioja, Aragón) destaca por su producción hortícola para industria y exportación (brócoli, espinaca, guisante, tomate, judía verde), donde también se enfrentan a plagas como orugas, pulgones, ácaros y trips.
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